Entonces coloreo una sonrisa que me ayude a borrar esta imagen que tanto me asusta, una sonrisa que oculte lo que originalmente me había dispuesto a expresar... Una sonrisa que tape la ingente cantidad de sentimientos vacíos (plenos y verdaderos) que acaloran y abrazan mi propia verdad, que desprenden de mí, las últimas gotas de bienestar... Una sonrisa metafórica, insignificante, irreal y deplorable que esconda con creces lo que ya no pude hablar, lo que ya no me atreví a exteriorizar...
Escrito el año 2006
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